El puesto implica asignar habitaciones según las solicitudes y preferencias de los clientes, registrar previamente a los huéspedes seleccionados y preparar los paquetes de llaves. Se requiere organizar y coordinar los procedimientos de ingresos y registros previos para grupos que llegan, así como examinar, hacer seguimiento y atender las solicitudes de cambio de habitación o de fechas de partida. También se debe confirmar las reservaciones y cancelaciones, examinar diariamente las habitaciones fuera de servicio y asegurarse de que las tarifas se ajusten a las normas del mercado. Otras responsabilidades incluyen verificar y reajustar la facturación, archivar la documentación de los huéspedes, activar las llaves de las habitaciones, obtener pagos válidos y preparar informes diarios. Es fundamental cumplir con las políticas de la compañía y mantener una apariencia profesional.